Alicante da un paso firme hacia una movilidad más limpia y eficiente con la instalación de 20 nuevas estaciones de recarga para vehículos eléctricos, que ofrecerán un total de 40 plazas repartidas estratégicamente por la ciudad. Esta iniciativa, promovida por la Mancomunidad de l’Alacantí, forma parte de un ambicioso Plan de Instalación de Puntos de Recarga en la comarca, que también contempla la colocación de otras 34 estaciones en municipios como San Vicente, San Joan, Mutxamel y El Campello, así como el mantenimiento de ocho ya existentes.
El proyecto se desarrollará bajo un modelo de concesión pública por un periodo de diez años, con posibilidad de prórroga, e incluye el suministro, instalación, puesta en servicio y explotación de los equipos. Una vez adjudicado, se prevé que las estaciones estén operativas en un plazo de cinco meses.
La apuesta por el vehículo eléctrico debe ir acompañada de un acceso asequible para la ciudadanía. Reducir su coste y promover su uso no solo mejora la calidad del aire, sino que contribuye a una ciudad más moderna y preparada para los desafíos del siglo XXI. Sin embargo, esta transición no puede hacerse de forma aislada. Es esencial que se combine con una red de transporte público eficiente y accesible, junto con una infraestructura sólida para bicicletas y otros medios de movilidad personal.
Tarde, pero Alicante ya ha iniciado este camino con medidas como la bonificación del impuesto de circulación para vehículos eléctricos, la incorporación de 23 autobuses urbanos totalmente eléctricos y 20 híbridos, la implantación de la Zona de Bajas Emisiones, y actuaciones que priorizan al peatón y al ciclista, como la peatonalización de calles, el calmado del tráfico y la creación de nuevos carriles bici.
Estas acciones forman parte de una visión integral de movilidad sostenible, que apuesta por energías limpias y por una convivencia fluida entre diferentes modos de transporte. La combinación de vehículo eléctrico, bicicleta y transporte público no solo es deseable, sino necesaria para lograr una ciudad más habitable y alineada con los objetivos climáticos del presente.
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