
Venganza, Fredat, Trueno Culebra + Old Losers
- Día: 04 de enero
- Hora: 12.00h
- Lugar: CSA La Mistelera (La Xara)
- Entradas: 10€
El punk vuelve a ocupar el mediodía del domingo con una cita que ya huele a ritual. El próximo domingo 4 de enero, el colectivo Baix Terra organiza en el CSA La Mistelera una jornada que combina conciertos, militancia sonora y paella popular bajo un lema tan claro como contundente: “Arredeu quin comboi!”.
La cita arranca a las 12:00 del mediodía, fiel al dogma no escrito del circuito alternativo: domingo es día de paella, y nadie en La Xara parece dispuesto a romper ese equilibrio sagrado entre ruido y arroz. La entrada tendrá un precio de 10 euros.
Punk ibérico, escena local y nuevas apuestas
El cartel reúne varias generaciones del punk estatal, con nombres que conectan pasado, presente y futuro del género:
- Venganza
Uno de los últimos estandartes del punk hardcore ibérico en activo. Sus letras han sido auténticos himnos para más de una generación y forman parte de la memoria colectiva del underground estatal. Su regreso al escenario de La Mistelera es, sencillamente, una celebración. - Fredat
Referentes absolutos del punk local. Cada concierto es distinto al anterior, siempre imprevisible y siempre intenso. Punk sin adornos, directo y brutal, como debe ser. - Trueno Culebra
Banda emergente desde València, formada por miembros curtidos en proyectos como Social Combat, Ownfight o Gigatron. Punk rock sólido y honesto, con disco recién editado y muchas ganas de demostrarlo en directo. - Old Losers
Nuevo proyecto con caras muy reconocibles de grupos como Invisible War o Punko!UK. Llegan desde Benidorm con actitud, experiencia y ese espíritu de parking y carretera que nunca falla. De perdedores, nada.
Mientras se remueve el arroz, la jornada contará también con el acompañamiento de Martirio i Cansalà junto a Pakito Porros, poniendo la banda sonora perfecta al momento más gastronómico del día.
Como siempre, el concierto de Baix Terra en La Mistelera no es solo una sucesión de actuaciones, sino una celebración comunitaria del punk como espacio de encuentro, memoria y presente. Un plan de mediodía para empezar el año como toca: música en directo, letras afiladas, paella compartida y escena viva.
















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