
El Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil-Albert ha anunciado los seis proyectos seleccionados en el programa ‘Arte en la Casa Bardin’, que formarán parte de las exposiciones temporales previstas entre 2025 y 2026.
El certamen, que alcanza su séptima edición, ofrece una plataforma para la participación conjunta de artistas alicantinos y comisarios, quienes desarrollan propuestas adaptadas a la sede del IAC. Este año, se ha ampliado el periodo de exhibición y se ha incrementado la dotación económica para los seleccionados.
El proyecto «Sentencias y madrigales», de Massimo Pisani y Luisa Pastor, encabeza la lista de propuestas elegidas por el jurado. Su trabajo invita a reflexionar sobre la tensión entre la burocracia y la expresión artística mediante 25 obras en papel y piezas con altavoces.
Otra de las exposiciones seleccionadas es «Los hijos del ciervo», del fotógrafo José Luis Carrillo y el comisario Antonio Cervera. Se trata de una propuesta concebida específicamente para el IAC que establece un diálogo entre imágenes inéditas y las composiciones finales.
El programa también incluirá «Misterio y necesidad», de Susana Guerrero y Eduardo Infante, bajo la curaduría de Jaime Pérez Zaragozí. Este proyecto, iniciado hace dos años en la galería Casa Bancal de Altea, presenta dibujos, pinturas, esculturas e instalaciones creadas en conjunto por ambos artistas.
La naturaleza será protagonista en «Superficie natural», donde el artista Isidro Blasco y la comisaria Isabel Tejeda proponen una serie de collages artísticos en tres dimensiones, elaborados con fotografías de formaciones geológicas de Alicante y el norte de Murcia.
Por su parte, Silvia Lerín, con la curaduría de Ana Pastor, explorará la dualidad de la línea en «La línea de la vida». La muestra presentará obras bidimensionales y tridimensionales con un uso característico del color y la textura, generando atmósferas sutiles y complejas.
Finalmente, «Monumentos utópicos», de Elio Rodríguez y comisariado por Rafael Serrano, abordará la relación entre lo monumental y lo orgánico, el ámbito real y el utópico. A través de diferentes formatos, la exposición planteará un diálogo crítico y lúdico con monumentos icónicos.
Estos seis proyectos se distribuirán en el calendario expositivo con tres muestras en 2025 y tres en 2026, permitiendo una mayor duración de cada exhibición. Asimismo, el Instituto Juan Gil-Albert ha aumentado la retribución para los participantes, con 2.000 euros para cada artista y 1.200 euros para cada comisario.
El jurado de esta edición ha estado compuesto por profesionales del ámbito cultural y artístico, encargados de seleccionar las propuestas más innovadoras y adaptadas a la línea expositiva del certamen. Además de las exposiciones, el programa incluirá visitas guiadas, encuentros entre artistas y comisarios, y la publicación de un catálogo acorde con la serie editorial ‘Arte en la Casa Bardín’.
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