
Mientras la Conselleria de Educación sigue ignorando la realidad de la educación pública y el Ayuntamiento prioriza los intereses de las constructoras antes que los de la ciudadanía, nuestros colegios e institutos están desbordados. La falta de previsión en la creación de nuevos barrios está provocando una situación insostenible: se construyen viviendas sin pensar en la gente que las va a habitar, sin dotaciones básicas, sin colegios, sin institutos, sin centros de salud suficientes. Y mientras tanto, nuestros hijos e hijas estudian en barracones y en aulas masificadas.
Por eso, queremos una educación pública de calidad, inclusiva e integradora, y para eso necesitamos un espacio digno para aprender.
La lucha incansable de las familias ha conseguido que, tras años de reivindicaciones y mucho más tarde de lo prometido, comiencen por fin las obras del colegio La Almadraba. Pero esto demuestra que sin presión social, sin movilización, las instituciones no cumplen con su obligación de garantizar una educación de calidad.
Sin embargo, la situación sigue siendo crítica, especialmente en los institutos de la zona de Playa de San Juan, Albufereta y Cabo de la Huerta. La realidad es inaceptable: más de 11 aulas prefabricadas, excesos de hasta 200 alumnos por centro, la pérdida de espacios esenciales como laboratorios, aulas de música y dibujo, gimnasios deteriorados y patios y aseos insuficientes. La Conselleria de Educación no puede seguir mirando hacia otro lado: es imprescindible que inicie de inmediato los trámites para la construcción de un nuevo instituto de secundaria en la zona del PAU 5.
Desde la Plataforma por un Espacio Digno para Aprender, integrada por las 10 AMPA de la zona, así como por docentes y estudiantes, seguimos luchando por una educación digna. Por eso, te invitamos a la CHOCOLATADA REIVINDICATIVA que celebraremos el viernes 4 de abril a las 17:00 en el parque situado en la C/ Historiador Vicente Ramos 1, a la altura de Correos.
Habrá chocolate caliente, merienda para las familias asistentes y actividades lúdicas para los más pequeños. Pero, sobre todo, habrá una exigencia clara: queremos soluciones ya.
¡NO SOMOS SARDINAS EN LATA!
¡POR UN ESPACIO DIGNO PARA APRENDER!
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