En esta paulatina conversión en Mauritania, al que el Ayuntamiento colabora con la tala indiscriminda de árboles, Barcala y compañía, al menos, han tenido una buen ocurrencia, poniendo 6 surtidores de agua refrigerada de uso gratuito en lugares de gran concurrencia de la vía pública. En apenas tres semanas desde su entrada en servicio, estos dispositivos ya han suministrado un total de 18.848 litros, que han permitido evitar 37.696 botellas de plástico de 500 ml, según los cálculos de la empresa mixta municipal.
El total de descargas computadas por Aguas de Alicante hasta el pasado 31 de julio para el llenado de botellas asciende a 34.368. El surtidor más utilizado es el del Mercado Central, en la avenida de Alfonso X El Sabio, que ha suministrado 10.658 litros; seguido del situado en el acceso al ascensor al Castillo de Santa Bárbara, en la avenida de Juan Bautista Lafora, con 8.600. Estas dos fuentes con conexión eléctrica y a la red municipal de abastecimiento de agua fueron las dos primeras en prestar servicio el 8 de julio.
El tercer dispositivo con mayor demanda es el del paseo de la playa de El Postiguet, que ha servido 7.825 litros de agua y, a continuación, figuran el de la avenida de Niza en la Playa de San Juan (3.365 litros); el de la plaza de la Santísima Faz, a espaldas del Ayuntamiento (2.689) y el situado en la zona deportiva del Monte Tossal, junto a las piscinas municipales (1.231), si bien este último no comenzó a prestar servicio hasta el pasado día 22.
Segunda y tercera fase por todos los barrios
La segunda fase contempla la colocación de nuevos dispositivos en la plaza de Navarro Rodrigo de Benalúa; plaza de España, junto al coso taurino; acceso al Hospital General de Alicante por su entrada principal; plaza de Séneca; plaza de la Constitución en Villafranqueza y entorno del monasterio de la Santa Faz. Y en la tercera fase, estas fuentes públicas de agua fresca llegarán a la isla de Tabarca, Urbanova, paseo Joan Fuster en Gran Vía Sur, plaza de Argel en Virgen del Remedio, plaza de Castellón ‘Palmeretes’ en Carolinas Bajas y plaza de Orán en la zona Norte, entre otras propuestas que irán incorporándose.
La puesta en marcha de este proyecto piloto entre el Ayuntamiento y Aguas de Alicante cumple los objetivos de facilitar la disponibilidad de agua de grifo a la ciudadanía y a los turistas en espacios públicos de máxima concurrencia ciudadana, de aportar valor social haciendo la ciudad más amigable, de facilitar el consumo de agua de grifo como bebida saludable y de reducir la generación de residuos gracias a la recarga de envases, este proyecto arranca con una fase piloto, aunque nace ya con vocación de continuidad y tiene previstas posteriores hitos, con la colocación de una veintena de surtidores de agua refrigerada hasta final de 2024 en diferentes ubicaciones de Alicante, incluidas zonas más periféricas.
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