Las mentiras se rebaten con verdades…
Recientemente, algunas declaraciones públicas —incluyendo las del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump— han generado dudas acerca de la seguridad del uso de paracetamol durante el embarazo, sugiriendo un posible vínculo con el autismo y otros trastornos del neurodesarrollo. Sin embargo, hasta la fecha no existe evidencia científica que demuestre una relación causal entre el uso de paracetamol en la gestación y el desarrollo de estos trastornos.
El paracetamol es uno de los analgésicos y antipiréticos más utilizados a nivel mundial, tanto en población general como en mujeres embarazadas. La literatura médica muestra que algunos estudios observacionales han sugerido posibles asociaciones entre la exposición prenatal a paracetamol y alteraciones en el neurodesarrollo. No obstante, estos trabajos presentan limitaciones metodológicas importantes, como la dificultad de controlar factores de confusión (por ejemplo, la presencia de fiebre o dolor durante el embarazo).
Las agencias reguladoras, incluida la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) y la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), han revisado de forma continua la seguridad del fármaco. Hasta el momento, las autoridades sanitarias concluyen que no hay pruebas suficientes para modificar las recomendaciones vigentes de uso.
Recomendaciones de uso en la gestación
El manejo clínico debe realizarse de manera prudente e individualizada. En mujeres embarazadas, el paracetamol puede utilizarse de forma segura siguiendo estas pautas:
- Administrar la dosis más baja eficaz.
- Limitar su uso al tiempo estrictamente necesario.
- Emplearlo siempre bajo indicación y supervisión médica.
Es importante recordar que la fiebre no tratada y el dolor intenso durante el embarazo también conllevan riesgos para la madre y el feto. Por tanto, el equilibrio riesgo-beneficio debe guiar la decisión terapéutica.
La seguridad de los medicamentos que contienen paracetamol está sujeta a una supervisión continua por parte de la EMA y la AEMPS. En caso de que emergiera nueva evidencia relevante, estas agencias lo comunicarían de manera inmediata a través de sus canales oficiales.
Por lo tanto, día de hoy, las mujeres embarazadas pueden seguir utilizando paracetamol cuando sea clínicamente necesario, siempre siguiendo las recomendaciones de dosificación y duración más prudentes, y bajo supervisión médica. Las declaraciones que sugieren un vínculo causal con el autismo carecen de sustento científico y pueden generar confusión innecesaria en la población.
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