El Ministerio de Trabajo ha cerrado un acuerdo con CCOO y UGT para ampliar de forma significativa los permisos laborales vinculados al fallecimiento de familiares y a los cuidados paliativos. Un avance largamente esperado que sitúa el cuidado y el duelo en el lugar que merecen dentro del marco laboral, aunque la patronal haya decidido quedarse al margen.
El pacto contempla ampliar hasta 10 días el permiso por fallecimiento de un familiar y crear un nuevo permiso de 15 días para acompañar y atender a familiares en situación de cuidados paliativos. Se trata de una medida que reconoce, por fin, que el dolor, la despedida y el acompañamiento no pueden comprimirse en plazos irreales ni tratarse como una excepción incómoda dentro de la vida laboral.
Desde Trabajo se subraya que la ausencia de la patronal no resta valor ni alcance al acuerdo. Al contrario, el Ministerio defiende que es una decisión clave para modernizar las relaciones laborales en España y alinearlas con los estándares europeos, poniendo el bienestar de las personas trabajadoras en el centro.
La negativa de CEOE y Cepyme, basada fundamentalmente en argumentos de coste, ha llevado al Ministerio a dar por cerrada la negociación con las organizaciones empresariales. Aun así, el Ejecutivo insiste en que este avance no está relacionado con el absentismo ni con la productividad, sino con una visión más saludable y responsable del trabajo. Obligar a reincorporarse a los pocos días tras la pérdida de un hijo o de un familiar cercano no es cultura del esfuerzo, es una fuente directa de sufrimiento y enfermedad.
La propuesta normativa incluye que el permiso por fallecimiento del cónyuge, pareja de hecho o familiares hasta segundo grado de consanguinidad pueda disfrutarse de forma continuada o discontinua durante las cuatro semanas posteriores al deceso. El nuevo permiso por cuidados paliativos se aplicará a los mismos grados de parentesco, reconociendo la carga emocional y física que implica acompañar a una persona en el final de su vida.
Además, el Real Decreto incorporará un permiso específico de un día para acompañar a una persona en el proceso de eutanasia, destinado a cualquier trabajador o trabajadora designada para ello, exista o no parentesco. Una medida que refuerza la idea de acompañar con dignidad hasta el último momento.
El Ministerio de Trabajo ha anunciado que comenzará de inmediato a trabajar para asegurar el respaldo parlamentario necesario y sacar adelante la norma. Confía en que obtenga un amplio apoyo, al tratarse de una necesidad compartida por toda la sociedad, más allá de ideologías o clases sociales.
Reconocer el derecho al duelo y al cuidado no es una concesión: es sentido común. Este acuerdo supone un avance claro hacia un modelo laboral más empático, más justo y más acorde con la vida real de las personas.
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